IGLESIA APOSTÓLICA PROFÉTICA DE JESUCRISTO

 

Ministerio Profético

       Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete. Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo y para Dios. Asimismo, los profetas hablen de dos o tres, y los demás juzguen. Y si algo le fuere revelado a otro que estuviere sentado, calle el primero. Porque podéis profetizar todos uno por uno, para que todos aprendan, y todos sean exhortados. Y los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas…                                  1 Corintios 14:27-32

       El ministerio profético está formado por los hermanos y hermanas que han recibido de parte del Señor los dones de profecía, diversos géneros de lenguas, interpretación, visión y discernimiento de espíritus.

       El don de Profecía: es la especial capacidad que Dios da a ciertos miembros del Cuerpo de Cristo, de recibir y comunicar un mensaje inmediato de Dios a su pueblo por medio de una declaración divinamente ungida.

       El don de Lenguas Proféticas: es la capacidad especial que Dios da a ciertos miembros del Cuerpo de Cristo de recibir y comunicar un mensaje inmediato de parte de Dios a su pueblo por medio de declaraciones divinamente ungidas en un lenguaje que nunca han aprendido.

       El don de Interpretación: es la capacidad especial que Dios da a ciertos miembros del Cuerpo de Cristo, que da a conocer en lenguaje vernáculo el mensaje del que habla lenguas proféticas.

       El don de Visión: es la especial capacidad que Dios da a ciertos miembros del Cuerpo de Cristo de mirar con los ojos espirituales algunas cosas del mundo espiritual tanto divino como satánico.

       El don de Discernimiento de espíritus: es la capacidad especial que Dios da a ciertos miembros del Cuerpo de Cristo que les permite saber con certeza ciertas clases de conducta que se dicen ser procedentes de Dios si son en realidad divinas, humanas o satánicas.

       El ministerio profético dado su sobrenaturalidad y carácter revelatorio es de los más buscados por los creyentes y ciertamente el desarrollo de estos dones es muy importante en la vida de la iglesia. La base para el crecimiento de estos dones está en la oración, el ayuno y la lectura de la palabra de Dios, lo que hemos llamado estar en el secreto del Señor. El ministerio profético en acción constituye un poderoso instrumento para la edificación, exhortación, consuelo y prevención en la vida de la iglesia, así como una especial promoción para la manifestación del Espíritu Santo.

Funciones del Ministerio Profético

      Al leer el Nuevo Testamento nos damos cuenta que sus funciones eran más amplias que anunciar el futuro, aunque también lo hacían según Hechos 11:27-28 pero su trabajo incluía también:

  1. Perfeccionamiento de los santos, Efesios 4:11-12.
  2. Revelación de dones específicos, 1 Timoteo 4:14.
  3. Revelación de llamamientos específicos, Hechos 13:1-3.
  4. Edificación, exhortación y consuelo a la iglesia, 1 Corintios 14:31, Hechos 15:30-32.
      Los cuidados

      El liderazgo de la iglesia, pastores, maestros, consejo y directores de ministerios deberán, bajo la guianza directa del Espíritu Santo, aplicar concreta y diligentemente lo que entienden debe ser la práctica de la voluntad de Dios para la iglesia. La manifestación profética funciona como luz alumbrando el camino y no como legalidad profética que tensa toda la actividad de la iglesia. Esta es una sana convivencia y valoración del ministerio profético actual, mientras se respete la manifestación profética y se le de su lugar en la vida de la iglesia, no caeremos en la domesticación de esta.

      Esta es una de las grandes enseñanzas que hemos adquirido en este difícil proceso, ya que de pronto frente a la manifestación profética uno como pastor se siente inválido y con gran temor de no acertar en las decisiones, la iglesia espera que todas las líneas sean dadas por voz profética y se concentra todo en una visión muy mística que puede rayar en el fanatismo. Dios no quiere que la iglesia esté desequilibrada, así como se desequilibra con la ausencia del ministerio profético también sucede cuando se le da toda la preeminencia a este.

      Actividades del Ministerio

      El líder del ministerio profético debe trabajar muy unido al pastor y mantenerlo enterado de todo mensaje profético, tiene la responsabilidad de promover la oración, el ayuno y la lectura de la Biblia entre los miembros del ministerio, convocar a la escuela semanal de profetas y coordinar las actividades de los profetas, tales como:

  • Oración antes de cada culto.
  • Oración durante el culto por el derramamiento del Espíritu santo.
  • Colocación del pilar profético en cada actividad.
  • Recolectar las diversas revelaciones proféticas (profecías, sueños, visiones).
  • Ministración periódica a nuevos creyentes
  • Visitaciones de restauración.